Este Centro Veterinario y en la localización actual, en Valdelagrana, fue creado definitivamente en Junio del año 2005 con el fin de poder desarrollar la profesión veterinaria como más me gusta, con dedicación, profesionalidad y personalización. Siempre pensé que la mejor clínica es aquella en la que la interacción con el cliente tiene como finalidad el mejor trato a su mascota.

Licenciado en Veterinaria en 1991 por la Universidad de Córdoba y especialista en Medicina de Pequeños Animales, después de trabajar desde 1993 en Alicante y El Puerto de Santa María, en clínicas propias, siento la necesidad de hacer algo diferente que cubra mis espectativas profesionales y mi forma de entender lo que significa la Clínica diaria, poniendo en práctica todo lo aprendido a lo largo de mi dilatada carrera y mis formaciones complementarias con estudios de postgrado.

Así, la Clínica Veterinaria Valdelagrana nace con el objetivo de ofrecer un servicio y un trato diferente, donde lo importante es el paciente.

Nuestro mayor empeño es tratar a las mascotas de forma individualizada bajo la premisa de que no hay enfermedades sino enfermos.

Por ello, además de ejercer la Medicina Alopática o Medicina Occidental, incorporo los conocimientos adquiridos de otro tipo de terapias o medicinas, como son la Medicina Tradicional China, Medicina Ortomolecular, Homeopatía, Oligoterapia, entre otras, con estudios de postgrado universitario en las universidades de Barcelona y Valladolid, que dan un enfoque diferente al trato con el paciente y al concepto de enfermedad. De este modo, ayudamos a nuestros pacientes desde el origen de la enfermedad y no sólo desde la propia sintomatología.

Somos la primera clínica en El Puerto de Santa María en utilizar en nuestros protocolos de trabajo, la ACUPUNTURA, FITOTERAPIA, HOMEOPATÍA-HOMOTOXICOLOGÍA, MEDICINA ORTOMOLECULAR , OLIGOTERAPIA y REHABILITACIÓN ACTIVA Y PASIVA.

No se trata de curar enfermedades, sino de curar enfermos, de comprender qué es lo que ocurre en nuestra mascota y en su entorno. Es fundamental que el/la propietario/a sepa advertir esas señales de alarma que llamamos "síntomas" mucho antes de que comience la enfermedad, de forma que podamos actuar lo más rápidamente posible.

Debido a esa interacción tan estrecha entre propietario/a y mascota, éste/a puede llegar a notar que algo está pasando antes de que una analítica o examen general lo demuestre y en la Clínica debemos saber cómo actuar desde este preciso momento.

La buena interacción o comunicación con el cliente o propietario/a deriva hacia un mejor diagnóstico y, por tanto, hacia un mejor tratamiento.

"Nos gustaría tratar a tu mascota para que no enferme, no sólo curarla cuando ya esté enferma".